Todo el año es carnaval

Por  Juan Salinas Bohil

Como se esperaba dio comienzo el Primer carnaval federal, latinoamericano y popular, grotesco y largo apellido de una fiesta popular en franca declinación. Los ricos lo ignoran, los del medio escaparon a apiñarse donde pudieron y el pobrerío que no tiene ni siquiera la tarjeta SUBE "disfrutó" de la parada.

Buenos Aires no es Río, ni Venecia, pero algunos lo creen.

Extraña parada la del gobierno nacional que fue quien lo organizó, ni más ni menos que en la avenida 9 de julio teniendo como destino competir con los corsos barriales del gobierno de esta Ciudad con la que está enfrentado. ¿No tendrá otra cosas de la que ocuparse? Bueno, eso de enfrentado es una hipótesis remotísima debido a que después que la administración comunal juró y perjuró que no estaba preparada para administrar de la noche a la mañana los subterráneos como lo urgía el Ejecutivo nacional, con una verónica que dejó sin habla al espectador más pintado los tomó para aumentar el costo del pasaje un 127% en menos que canta un gallo. Y ahora está pensando en devolverlos. ¡Hum!

Dos feriados más no le quitan una mancha al tigre. Hay tantos durante el transcurso del año que sería más mucho más honesto decretar que "Todo el año es carnaval" y directamente no ir a trabajar en una especie de "Feriados para Todos" que hace cincuenta años anticipó el cantautor Rodolfo Zapata con su conocidísimo "No vamo a trabajar". ¡Medio siglo! ¡No somos nada!

La fiesta del consumo irracional impulsada por el kirchnerismo abarca a todas las capas de la población: igual que con el menemismo. Los intereses de todo tipo que se están pagando son carísimos. Los muchos piensan que es mejor mirar para otro lado y mezclarse en el rebaño para pasar desapercibido. ¡Pobres ilusos! Como si no le fuera a tocar. Si ya los está alcanzando: y a toda velocidad.

Pocas voces autorizadas han ofrecido una visión distinta a la del dolce far niente laboral. Una de ellas fue la de la Cámara de Comercio e Industria de La Plata que para fin del año que pasó expresó "su preocupación por el impacto negativo que tuvieron en las ventas los asuetos administrativos dispuestos por el Gobierno", advirtiendo que "la medida beneficia sólo a lugares turísticos y por la fuerte caída de las ventas".

"Esos días se amesetaron las ventas porque la gente gastó el dinero en otra ciudad, se debería estudiar la manera de dar los feriados en los períodos en los que se afecte menos al comercio. La segunda quincena de diciembre es una de las que más se vende en todo el año y con esas medidas se perjudica la actividad", agregó la Cámara.

La entidad empresaria destacó además que la medida conspiró contra la aspiración de los comerciantes platenses de realizar una cantidad importante de ventas en ocasión de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, "período del año en el que el comercio tiene las mayores expectativas de alcanzar un buen nivel de actividad".

En esa línea, se analizó la tendencia del Gobierno de disponer durante el año de nuevos feriados largos. "En esas fechas trabajan más los restaurantes, hoteles y comercios de los lugares de turismo, pero el comerciante que tiene un negocio en la Ciudad vende mucho menos, no obstante tiene que pagar los sueldos, el alquiler y los demás gastos fijos", se informó en el comunicado dado a conocer por la entidad empresaria.

La Cámara de Comercio e Industria de La Plata advirtió que el dinero que se gasta en los lugares de turismo deja de gastarse en los sitios en los que vive y trabaja la gente. "Se produce una fuerte transferencia de recursos de los centros urbanos a los lugares de turismo, pero no se genera más riqueza".

Desde el sector se indicó que cuando el Gobierno dispone nuevos días feriados debería "al menos" asumir el costo de las cargas sociales, ya que ellos deben pagarle a los empleados como si trabajaran un día domingo.

En ese sentido los empresarios solicitaron se estudien las fechas en las que los asuetos afectarían menos la actividad comercial. "En La Plata muchos restaurantes estuvieron vacíos, además, la mayoría de la gente que se queda es porque no puede gastar o se va a pasar esos días a una quinta. Si quieren dar una semana que sea para Carnaval o Semana Santa, pero que no haya tantos feriados puentes en cualquier otra fecha del año".

Hace más de setenta años los alumnos iban a clase los sábados y hasta el correo tenía un turno nocturno de atención. Eran otros tiempos. Se hablaba menos y se trabajaba más.